Un exceso de humedad en el ambiente es molesto e incluso puede llegar a ser perjudicial para la salud. Sobre todo para las personas que sufren asma, problemas respiratorios o enfermedades en la piel o huesos. En estas situaciones, utilizar un deshumidificador es la mejor solución para lograr el máximo confort y proteger la salud de quienes te rodean. En este artículo te explicamos cómo funciona.
Qué es un deshumidificador
Ya sea en ciudades costeras o en zonas de montaña e interior en las que se producen lluvias y nieblas frecuentes, mantener a raya el nivel de humedad relativa en el interior del hogar es una prioridad. En algunos casos, un exceso de humedad puede incluso ocasionar daños en la propia vivienda: aparición de moho, daños en el parquet, oxidación de los elementos metálicos…
Soluciones como los nuevos deshumidificadores Aral Daitsu reducen al máximo la humedad y mantienen el aire seco, confortable y saludable. Además, mantienen el porcentaje de humedad en el ambiente de manera controlada y constante. Con los deshumidificadores pasarás menos calor y frío, ya que una humedad excesiva acentúa tanto la sensación térmica de calor en verano como la sensación de frío en invierno.
Cómo funciona un deshumidificador
La mayoría de los deshumidificadores tienen un ventilador interno que absorbe el aire de la estancia. En su interior condensan las moléculas de agua presentes y la acumulan en un depósito que se debe de vaciar periódicamente. Antes de salir seco al exterior, el aire pasa por una zona caliente donde recupera la temperatura ambiente.
¿A qué niveles de humedad relativa es recomendable utilizar un deshumidificador? El porcentaje de humedad relativa óptimo para el bienestar ronda el 50-55%. Si en el interior de tu casa se superan estos niveles, deberías plantearte la adquisición de uno de estos aparatos.
¿Cuántas horas de uso son necesarias para mantener la humedad a unos niveles óptimos? Esta es una cifra que puede variar dependiendo de los metros cuadrados de superficie y la capacidad de deshumectación del deshumidificador. Sus efectos empiezan a notarse casi inmediatamente después de ponerlo en marcha. Sin embargo, por norma general lo ideal es mantenerlo funcionando unas 12 horas al día.
Tipos de deshumidificador
Existen dos grandes tipos de deshumidificadores en función de la tecnología que utilizan para eliminar la humedad del aire:
- Deshumidificador con compresor. Son los modelos más comunes en el ámbito doméstico. Su funcionamiento es sencillo y similar al de un aparato de aire acondicionado. El aire es aspirado gracias al ventilador, es filtrado y llevado a un condensador con bobinas de enfriamiento a baja temperatura donde el vapor de agua contenido en el aire se convierte en líquido que se almacena gota a gota en un depósito de agua. Antes de ser expulsado, el aire se recalienta para que vuelva a estar a temperatura ambiente. Este sistema requiere un mantenimiento mínimo: limpiar el filtro de forma regular y vaciar el tanque de agua periódicamente o conectar el depósito a un sistema de drenaje continuo. El deshumidificador con compresor reduce la humedad relativa hasta un nivel del 40% y es eficaz sobre todo a temperaturas ambiente por encima de los 12ºC. Cuanto mayor sea la temperatura, mejor será la extracción de la humedad del ambiente.
- Deshumidificador con gel de sílice o desecantes. A diferencia del deshumidificador con compresor, esta tecnología se utiliza sobre todo en espacios con temperaturas muy frías. Es capaz de reducir la humedad hasta en un 40% en ambientes de hasta -50ºC. En este caso, el aire es aspirado y dirigido a un rotor de sílice que gira a baja velocidad y absorbe la humedad presente en el aire. Este tipo de deshumidificadores no utilizan compresor ni refrigerante. El gel de sílice es una sustancia química cristalina y muy porosa, uno de los productos con mayor capacidad de absorción que se conocen.
Nuestros deshumidificadores
Los dos nuevos deshumidificadores Aral de Daitsu no solo reducen al máximo el nivel de humedad y mantienen el aire seco y confortable, sino que además lo hacen con un nivel de ruido mínimo y con una gran eficiencia.
En su funcionamiento utilizan gas refrigerante ERP R290, que es la alternativa más sostenible y respetuosa con el medioambiente en comparación con otros gases refrigerantes.
Además, la tecnología de desescarche inteligente de los deshumidificadores Daitsu se activa de forma automática solo cuando es necesario, optimizando de esta manera el nivel de confort y el ahorro energético.
La elección de un deshumidificador depende de muchas variables, como el tamaño del área que desees deshumectar, la presencia de puertas, etc. Asimismo, es recomendable que el aparato se instale en una superficie plana alejada de las esquinas y paredes. Por lo tanto, lo mejor es dejarte aconsejar por un experto.